31.5.12

Desayuno en Tiffany´s


 Desayuno en Tiffany's es una película estadounidense del género comedia, rodada en 1961 y dirigida por Blake Edwards.
Protagonizada por Audrey Hepburn y George Peppard, contó con un reparto de actores secundarios que incluía a Patricia Neal, Martin Balsam, Mickey Rooney y José Luis de Vilallonga. La película es una adaptación bastante libre de la novela del mismo título de Truman Capote.
La banda sonora fue compuesta por Henry Mancini, y en ella que se encuentra la famosa canción Moon River, con letra de Johnny Mercer.
En 1961 la película ganó dos premios Óscar en las categorías Mejor banda sonora y Mejor canción.
En ella Paul Varjack es un joven escritor (George Peppard) mantenido por una mujer un tanto mayor, que se muda a un edificio de apartamentos en el que conocerá a una peculiar vecina, la joven Holly Golightly (Audrey Hepburn), una aspirante a actriz disconforme y un tanto alocada que solo es feliz visitando la tienda de diamantes Tiffany's y que lleva una extravagante vida de fiesta en fiesta siempre rodeada de numerosos hombres. Poco a poco se irá conociendo el pasado de Holly, antes llamada Lullaby, y los caminos de ambos se cruzarán, lo que los llevará a cambiar su estilo de vida y a descubrir la importancia de lo cotidiano.


 El personaje de Holly (según confesión del propio Truman Capote) se inspiraba en la actriz Carol Grace, por aquel entonces mujer de William Saroyan (después, se casaría con Walter Matthau).
Se ha cuestionado el racismo de la caricatura de un japonés que interpreta Mickey Rooney, situación ausente en la novela original.
Intervención del aristócrata español José Luis de Vilallonga interpretando el papel del millonario brasileño José da Silva Pereira, con el que Holly llega a estar prometida (no es la única vez que interviene como actor).
Inicialmente, la película iba a ser protagonizada por Marilyn Monroe (por expreso deseo de Truman Capote) y dirigida por John Frankenheimer. No obstante, el director prefirió darle el papel a Audrey Hepburn en contra de los deseos del escritor. Antes que Audrey Hepburn, Kim Novak se ofreció para dar vida a Holly, pero su oferta fue rechazada.
Tampoco George Peppard fue la primera opción. El papel le llegó de rebote, cuando, por incompatibiliad de fechas, fue rechazado por Steve McQueen, que ya había adquirido otros compromisos.
Originalmente, en la novela, Holly era bisexual, pero al entrar en la producción Audrey Hepburn, este matiz desapareció por completo.
La canción Moon River fue expresamente escrita para Audrey Hepburn, que no tenía nociones de canto. Su interpretación fue casi eliminada de la película y se mantuvo por el empeño de la actriz. La canción se convirtió rápidamente en un clásico y ha sido versionada por múltiples cantantes, como por ejemplo Frank Sinatra.
Audrey Hepburn cobró por su intervención 750 000 dólares, convirtiéndose en la segunda actriz mejor pagada de la época, después de Elizabeth Taylor.
Tiffany´s tuvo que abrir sus puertas en domingo para permitir el rodaje de las escenas ambientadas allí.
La película fue rodada en Technicolor.
En 2007 se subastó el vestido que lucía Audrey Hepburn en la película por nada menos que 467 200 £ (unos 700 500 € ), destinando este dinero a dos escuelas en Bengala promoviendo así la iniciativa del escritor Dominique Lapierre. Un ejemplar de este vestido de Givenchy, que Hepburn luce en las secuencias iniciales de la película, se puede admirar, material o virtualmente en el catálogo digitalizado del Museo del Traje de Madrid.
En el apartamento de Paul (George Peppard) aparece un gran retrato de Carlos III de España.


Fallos en la continuidad
En la escena de la despedida en la estación de autobuses, en el plano contra plano, el cigarrillo va cambiando inexplicablemente de mano y la continuidad de las expresiones faciales en la conversación tampoco tiene ningún sentido.
En una escena Holly se calza unas medias en su apartamento, a partir de ese momento, en diferentes escenas las medias van apareciendo o desapareciendo a voluntad.
Cuando Holly sube a ver a Paul por la escalera de incendios, el reloj siempre marca las cuatro y media. Sin embargo ella al cabo de un rato dice: "Oh, Dios mío, ya son las cuatro y media."


Fuente:  Wikipedia